También
expresa su "decepción y pesar" por una nueva oportunidad perdida de
despejar dudas sobre la "confesionalidad encubierta" del Estado español Protocolo cardenalicio. El
cardenal arzobispo Sitach ingresa sonriente en la Catedral, por detrás
de los reyes y por delante de los presidentes de España y de Cataluña. /
EFE